viernes, 7 de marzo de 2014

MENSAJES para trasmitir a cada miembro de la SIGUIENTE GENERACIÓN



  • Eres un ser deseado. Estás aquí porque el Universo lo quiso.
  • Siente que eres libre de ser lo que eres, no permitas que nada ni nadie te etiquete, ni te imponga guiones que no se corresponden con tu autenticidad.
  • Cada ancestro de tu árbol es un don que hay dentro de ti para ser usado a tu favor y al de todo el Universo.
  • Aprende a no pedir amor, simplemente ama.
  • Cree en los pequeños milagros de cada día y atiende a las coincidencias, en ellas hay mensajes ocultos que te guían en el correcto camino.
  • Cada día, haz un acto generoso con alguien cercano.
  • Si en tu árbol genealógico hubo traumas, sánalos actuando.
  • Déjate guiar por tu cuerpo, es sabio. Él te alertará de las situaciones de las que debas alejarte, sintiendo tensión y malestar. También te dirá cuando estás alineado con lo que eres, sintiendo relajación y bienestar.
  • No contamines tu cuerpo con tóxicos o una mala alimentación.
  • En cuanto puedas, sé independiente. Trabaja utilizando tu creatividad y hazte adulto.
  • Escribe un poema cada día.
  • Busca y provoca situaciones que te hagan reír.
  • Tiende a compartir, a colaborar a ser solidario.
  • Cuando tengas problemas, puedes analizarlos, puedes hablarlos, pero ten por seguro que hasta que no actúes no se producirá la transformación.
  • Siente GRATITUD por todo lo que te regala el Universo. 
  • Recuerda que nada en este plano de existencia perece, sino que se transforma.
  • Lee, estudia, conoce… experimenta por ti mismo.
  • No te apegues a nada material. No consumas lo que no necesitas.
  • Tampoco te apegues a ninguna creencia. Lo mismo que tu cuerpo se renueva constantemente, también lo deben hacer las ideas.
  • Siembra cada día las semillas que te lleguen de dentro o de fuera. La semillas pueden ser palabras, caricias, belleza, acciones. Ellas son los gérmenes de más sabiduría, amor, arte y salud.
  • Cuida con mimo el territorio que está más allá de tu cuerpo, tu casa, tu barrio, tu ciudad… el planeta y el Universo.
  1. de Alejandro Jodorowsky

martes, 4 de marzo de 2014

Francesco Tonucci un educador, un maestro, alguien que se atreve a crear...



He tenido la fascinante experiencia de conocer a una persona que realmente te plantea el mundo de cabeza, con la autoridad que da toda una vida dedicada a intentarlo, A mi, me ha encantado, en el pleno sentido del término, porque hay personas que su sólo existir nos plantean un desafío, una pregunta sobre lo que estamos haciendo con nuestras vidas, sobre lo que es realmente importante. Y, en este caso, Francesco se sitúa frente a uno de los desafíos más grandes de nuestro mundo, la educación, la escuela, los niños.



Es imposible en estas líneas hacer una sola presentación, ya que la magia y la pluma nos obligan a hacer dos: Francesco Tonucci, y FRATO.

El primero, Francesco, nació en Fano y vive en Roma, el segundo, Frato, nació en el corazón y la cabeza de Francesco y vive en todos los adultos que de alguna manera han descubierto que la única salida hacia un futuro plausible son los niños y niñas de hoy, mujeres y hombres de mañana.

        Francesco comparte su vida con su esposa; maestra que, como él, observa y aprende del silencio comprometido de los que apuestan por el futuro; y con sus tres hijos, su nieto y su nieta (Stefano, Francesca, Simone, Federico y Nina). De sus nietos dice que aprendió tanto, que le permitieron durante años ser niño. Su pequeña Nina le recuerda cada día, al que más sabe de niños del mundo, que no puede rendirse, que a pesar de la templanza de la voz como fruto de los años y la experiencia, necesitamos que siga gritando.


Francesco es el abuelo de pelo blanco que, recién jubilado, es cuando más comprometido y activo se encuentra. Y no es precisamente un compromiso en el recuerdo, es en el día a día, es en el saber hacer y en el decir, decir lo que siente y lo que piensa sin miedo, sobre todo porque nuestros niños y niñas lo merecen.

Francesco Tonucci por ser maestro, pedagogo y, sobre todo, por su vocación por la infancia se ha hecho merecedor del título de “niñólogo”.

Investigador del Instituto de Psicología del Consejo Nacional de Investigaciones (CNR) de Roma, ha dedicado su actividad profesional al estudio del pensamiento y del comportamiento infantiles en el ámbito de la familia, la escuela y la ciudad, siempre “con ojos de niño”.

Nadie como él sabe “Cómo ser niño” y cómo la infancia es una condición, ya que “Niño se nace”, el ha conseguido mantener esa característica durante toda su vida, ha hecho realidad el mito de Peter Pan, y esto es sólo cosa de genios.

Francesco, rompiendo límites y fronteras ha contado por el mundo las necesidades de los niños, nos ha contado como, escuchando “sus tonterías”, encontramos grandes soluciones, ya que cuando un niño dice una tontería no la ha oído de sus padres ni de sus maestros, por lo que probablemente encierre una gran verdad (“para ser feliz harán falta dos ó tres”).

        Francesco reivindica la necesidad de jugar, porque “Cuando los niños dicen ¡basta!”, en la ciudad que el sueña, “La Ciudad de los niños”, las plazas son espacios públicos para el juego, con pelotas, abuelos, risas, llantos, miradas… gritos y silencio, … pero sin coches.

Francesco se entristece cuando habla de “La soledad del niño” como la grave enfermedad de los que hoy viven en las ciudades ricas, de cómo los adultos programan su vida al segundo para realmente no hacer nada, de cómo obligamos a nuestros niños a vivir sin existir como lo que realmente son: niños.

Francesco sólo pide que se respete el art. 12 y el art. 31 de los Derechos del Niño y apuesta por las ventajas de un modelo escolar más democrático. Para él la escuela que tiene sentido es la escuela que forma ciudadanos y este trabajo empieza por darles la palabra a los niños.

Así lo ha hecho él siempre.

En 1968 (40 años ya) Francesco dejó que de sus manos de artista, de su esencia de genio y de su corazón de niño naciera FRATO y ¿quién es FRATO?. El segundo personaje que nos ocupa hoy.

Es un personaje cuyo proyecto y programa es mirar al mundo con ojos de niño, dar voz a los niños que normalmente callan, para denunciar en su nombre los errores que nosotros los adultos cometemos para con ellos.


Sus libros se han traducido al castellano, al catalán, al francés, al portugués y al gallego. Sus viñetas se “cuelan” entre las líneas de revistas inglesas, japonesas o israelíes.

Un día, en el 94, Frato pudo hacer una conferencia dibujada para más de 13.000 maestros y maestras  en Argentina, ¡todo un record para ¿un niño?!

Entre las páginas de su extensa bibliografía podemos sonreír, identificarnos, indignarnos y querer cambiar el mundo, podemos dejar escapar más de una lágrima o apretar los puños mientras el corazón acelera su marcha. Podemos mil cosas, pero lo único que no podemos es mantenernos indiferentes. Por todo ello debemos darles las gracias. Gracias a los dos por existir.


Entre los dos (Francesco y Frato) han conseguido que podamos ver “Con ojos de niño” y “Con ojos de maestro”, que a veces hay “Cosas que se pueden hacer con una nariz larga además de decir mentiras”, porque “niño se nace”, aunque no quieras, incluso, si los miramos bien podemos aprender “Cómo ser niño” y entender frases tan pedagógicamente correctas como “Si no os hacéis como yo”, y que “A los tres años se investiga”, que “Cuando los niños dicen ¡Basta!”, es necesario escuchar, que “La ciudad de los niños”, es la mejor ciudad para todos, y que Juan, un niño que va a nacer, nos está enviando algunas cartas… y así en un largo etc, de viñetas, frases, páginas y sueños nos lleva a poder disfrutar de Frato en “40 años con ojos de niño”.

De nuevo GRACIAS a los dos por existir, y sí Francesco, “Los pupitres florecerán”, y florecerán porque el verdadero peligro de los sueños es que se cumplen, y los dos juntos Francesco y FRATO, habéis conseguido, que miles de maestros y maestras de todo el mundo sigamos soñando. GRACIAS.

ERES UN PATITO FEO / UNA PATITA FEA

ERES UN PATITO FEO / UNA PATITA FEA
Recuerda que en tu adolescencia estás encontrando tu identdad, tu forma de ser propia y original. No te importe que te digan "raro, "rara", tú eres ÚNICO, ÚNICA y, por tanto, genial, pronto lo descubriras, cuando extiendas tus alas pra volar.